Marta y Esmeralda
Mi querida Martuky:
¡Qué pronto te fuiste!! Con apenas estrenadas tu cuarenta primaveras nos dejaste de forma inesperada. Conmocionadas nos dejaste por lo inesperado, por la celeridad con que partiste.
Agradezco a la vida haberte conocido, haber disfrutado contigo, sobre las tablas del Teatro Jovellamos, en aquella representación: "Detrás de Jason no siempre hay una Medea" . Te recordaré allí, sobre el escenario, correteando alegre, vivaracha vestida de blanco, riendo, con tu cándida sonrisa y desnudándote despacio, gozando de toda tu feminidad, rotunda, hermosa, voluptuosa, picarona, seductora, mujer,... Con tu vestido verde avanzabas hacia el micro y negabas con tu mano: - No, no, va a ser qué no.- con aquel tono firme y a la vez cargado de sensualidad, iniciaste tus palabras y todas las Medeas nos fusionamos contigo, en ese último discurso antes de bajar el telón y los aplausos.
Captabas como nadie la energía que había en el momento y en tí brillábamos todas, con tu belleza pura, sin tapujos, sin mentiras nos lanzabas al aplauso, a la satisfacción de haber roto las fronteras de los miedos, de las inseguridades.
Me quedo con esos momentos, aquel abrazo entre bambalinas donde vi tu admiración y tu agradecimiento hacia la mujer a la que se homenajeaba. Había gratitud, amor, respeto en tu mirada,... quizás no aprendiste lo suficiente para ser más resilente...quizás dijiste basta, no lo sé.
Me quedo con tu entusiasmo por crear, gracias a tí celebramos aquel encuentro por Juárez en Gijón. Tú pusiste tu esfuerzo, tu dinero incluso, tu entusiasmo en unos momentos en que no estabas al 100% pero supiste pedir ayuda y buscar apoyos para consolidar tu proyecto.
Novelas en el cajón, cuentos, un sin fin de proyectos por hacer dejas junto a tus perritos que te obligaban a salir de casa, a tener una rutina amorosa, donde el AMOR se escribe con mayúsculas, porque ese AMOR no sabe de carencias... Esos perritos eran tus vástagos... hoy se quedan huérfanos....
Ojalá encuentres luz, ojalá conectes ya con la luz que brilla en tí y vimos en tu mirada, en tu sonrisa dulce, en tu deseo de conocer, descubrir, aprender siempre vivo en tí. La niña que fuiste palpitaba en esos ojos brillantes cuando estabas interpretando un papel.
Celebro haberte conocido.
Hasta siempre MARTUKY PAULOVA
Te queremos, deja que el AMOR te guíe, y brilla con tu luz. Ahora ya, eres luz
Hermoso recuerdo; en similar encomienda laboro…
ResponderEliminarGracias, las dos tuvimos la oportunidad de trabajar con ella codo con codo, de sacar lo mejor... ella fue una de nuestras más fieles seguidoras y puso mucho amor en apoyar ese proyecto Jardines de Ariadna,...
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